Tarta de requesón sin hornear

Si está buscando un postre delicioso que no requiera horneado pero que ofrezca sabor y textura, no busque más que esta tarta de requesón sin hornear. Este pastel ligero y cremoso es perfecto para cualquier ocasión, ya sea una reunión familiar, una celebración o simplemente para darse un capricho. La combinación de requesón, leche condensada y nata agria crea un relleno rico y aterciopelado que satisface y refresca a la vez.

¿Y lo mejor? Esta receta es increíblemente fácil de preparar. Con unos sencillos pasos, tendrás un delicioso pastel que se conserva perfectamente en la nevera. Los cereales de desayuno añadidos le dan un delicioso toque crujiente, haciendo que cada bocado sea un poco más emocionante. Así que, ¡empecemos este delicioso viaje!

Receta completa:

Ingredientes

Para la tarta:

* 40 g de gelatina

* 200 ml de agua: para disolver la gelatina

* 600 g de Requesón: suave y cremoso

* 1 lata de leche condensada: unos 397 g

* 400 ml de nata agria: para la textura

* 10 g de azúcar de vainilla: para dar sabor

* 60 g de cereales de desayuno (bolitas): para añadir textura y textura crujiente.

Equipo necesario

* Tazones para mezclar

* Batidora o batidora eléctrica

* Fuente de horno o molde desmontable

* Tazas y cucharas medidoras

* Nevera

Pasos para hacer tarta de requesón sin hornear

Paso 1: Preparar la gelatina

1. Remojar la gelatina: En un bol pequeño, espolvorear la gelatina sobre 200 ml de agua fría. Déjala reposar durante unos 5-10 minutos para que florezca y absorba el agua.

1. Disolver la gelatina: Una vez que la gelatina haya florecido, caliéntela suavemente en el microondas o en el fogón hasta que se disuelva por completo. Tenga cuidado de no hervirla; sólo caliéntela hasta que la gelatina esté completamente líquida. Dejar enfriar un poco.

Paso 2: Preparar el relleno

1. Mezclar los ingredientes: En un bol grande, añadir el requesón, la leche condensada, la nata agria y el azúcar de vainilla.

2. 2. Mezclar bien: Con un batidor de varillas o una batidora eléctrica, bata la mezcla hasta que quede suave y cremosa. Asegúrese de que no queden grumos; una textura suave es clave para un pastel delicioso.

1. Añadir la gelatina: Una vez que la gelatina se haya enfriado a una temperatura tibia (no caliente), viértala lentamente en la mezcla de requesón sin dejar de remover. Esto asegura que la gelatina se distribuya uniformemente por todo el relleno.

Paso 3: Montar la tarta

1. 1. Preparar el plato: Engrasar el molde o forrarlo con papel pergamino para evitar que se pegue. Un molde desmontable funciona mejor para facilitar la extracción.

2. 2. Añade el relleno: Vierta la mezcla de requesón en la fuente preparada, alisando la parte superior con una espátula.

1. Añadir los cereales: Incorpore suavemente las bolas de cereales de desayuno a la mezcla. También puede espolvorear algunas por encima para añadir textura si lo desea.

Paso 4: Enfriar la tarta

1. Refrigerar: Coloque la tarta en el frigorífico durante al menos 4 horas o hasta que esté completamente cuajada. Es mejor dejarlo toda la noche para obtener resultados óptimos.

2. Servir: Una vez cuajado, retira con cuidado el pastel de la fuente de horno o del molde desmontable. Puede cortarlo en trozos y servirlo frío.

Información nutricional (aproximada por ración)

* Calorías: 220 kcal

* Proteínas: 9 g

* Grasas: 10 g

* Carbohidratos 28 g

* Azúcar: 16 g

Nota: Los valores nutricionales pueden variar en función de las marcas y cantidades de ingredientes.

Preguntas más frecuentes

1. 1. ¿Puedo utilizar otro tipo de queso?

Si prefiere un sabor diferente, puede utilizar queso ricotta o queso crema en lugar de requesón. Sólo tenga en cuenta la textura y el dulzor, ya que estos quesos pueden variar.

2. ¿Es posible hacer esta tarta sin azúcar?

Por supuesto. Puede utilizar sustitutos del azúcar o leche condensada sin azúcar para reducir el contenido de azúcar. Sin embargo, la textura puede variar ligeramente.

3. ¿Cuánto tiempo se puede conservar?

La tarta de requesón sin hornear puede guardarse en el frigorífico hasta 5 días. Asegúrese de taparlo bien para evitar que absorba otros olores.

4. ¿Puedo congelar este pastel?

Aunque es mejor disfrutarla fresca, puedes congelarla hasta 2 meses. Sólo tienes que envolverlo bien en papel de plástico y luego en papel de aluminio para protegerlo de las quemaduras del congelador. Descongélalo en la nevera antes de servir.

5. ¿Puedo añadir fruta al relleno?

Sí. Puede añadir frutas frescas o enlatadas, como fresas, arándanos o melocotones, al relleno para darle más sabor y valor nutritivo. Sólo tiene que ajustar el dulzor si es necesario.