Esta tarta de merengue y mandarina con relleno de crema de queso es un postre elegante que combina el crujiente dulzor del merengue con el rico y ácido sabor de la cuajada de mandarina fresca. Con sus delicadas capas y sofisticados sabores, esta tarta impresionará en cualquier ocasión, desde una cena festiva hasta una reunión familiar especial. El uso de mandarinas frescas, el esponjoso merengue y el cremoso relleno crean un postre que es a la vez refrescante e indulgente, convirtiéndolo en una receta atemporal para los amantes de los dulces a base de cítricos.
La tarta combina múltiples texturas y sabores: el merengue ofrece un bocado crujiente y fundente, mientras que la cuajada de mandarina aporta un delicioso toque cítrico que complementa a la perfección el suave y cremoso relleno de queso crema. La adición de arándanos y romero fresco para decorar eleva la presentación, transformando este postre en un espectáculo que hará que todos pidan repetir.
Lo que hace que esta receta sea realmente especial es su equilibrio entre dulzor y acidez. El merengue aporta un delicado dulzor, mientras que el acidulado requesón de mandarina evita que resulte demasiado rico. El relleno de crema de queso aporta una capa de indulgencia y suavidad, y la decoración añade un hermoso toque estacional que no sólo tiene un aspecto impresionante, sino que también realza el perfil de sabor general. Se trata de un postre que combina sofisticación con sencillez y que sin duda se convertirá en un favorito de la familia.
Receta completa:
Ingredientes:
Para el merengue:
* 190 g de claras de huevo (unos 6 huevos medianos)
* Una pizca de sal
* Pizca de ácido cítrico o 1 cucharadita de zumo de limón
* 250 g de azúcar (aproximadamente 1 taza de azúcar finamente granulado o en polvo)
* 25 g de maicena (o fécula de patata, aproximadamente 1,5 cucharadas soperas)
Para la cuajada de mandarina
* 300 g de mandarinas peladas (unas 4-5 mandarinas)
* 2 yemas de huevo (de huevos medianos, tamaño C1)
* 30 g de azúcar (aproximadamente 1 cucharada sopera colmada)
* (Opcional: Si le preocupa el amargor de la cáscara o no está seguro de la preparación de la cuajada, sustitúyala por un relleno de bayas o una mermelada ácida).
Para el relleno de queso crema
* 250 g de queso crema (por ejemplo, requesón o cualquier queso crema blando)
* 15 g de azúcar en polvo (aproximadamente 1 cucharada sopera, nivelada)
* 100 ml de nata espesa (33% de materia grasa)
Para la decoración:
* Mandarinas frescas (en rodajas o peladas)
* Arándanos rojos
* Romero fresco
* Azúcar en polvo (para espolvorear ligeramente)
Pasos:
1. Preparar el merengue:
* Precalentar el horno a 100°C.
* En un bol limpio, batir las claras de huevo y la sal con una batidora eléctrica a velocidad media hasta que se formen picos suaves.
* Añadir el ácido cítrico (o el zumo de limón) para estabilizar las claras y, a continuación, añadir poco a poco el azúcar sin dejar de batir hasta que se formen picos firmes y el merengue quede brillante.
* Tamizar la maicena sobre la mezcla de merengue e incorporarla suavemente con una espátula.
* Vierta el merengue en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, dándole forma en tres rondas uniformes (para las capas de la tarta).
* Hornear las capas de merengue durante aproximadamente 1 hora y 30 minutos o hasta que estén crujientes y secas. Dejar que se enfríen completamente en la bandeja.
2. 2. Preparar el requesón de mandarina:
* En una batidora o robot de cocina, triturar las mandarinas peladas hasta obtener un puré suave.
* En un cazo, mezclar el puré de mandarina, el azúcar y la maicena. Remover constantemente a fuego medio hasta que la mezcla espese y empiece a burbujear.
* En un bol pequeño, batir ligeramente las yemas de huevo. Una vez que la mezcla de mandarina haya espesado, verter lentamente un poco de ella en las yemas de huevo para atemperarlas, batiendo constantemente.
* Añadir poco a poco la mezcla de yemas atemperada de nuevo al cazo, sin dejar de batir. Cocer otros 2-3 minutos hasta que la cuajada haya espesado del todo.
* Retirar del fuego y dejar enfriar la cuajada a temperatura ambiente.
3. 3. Preparar el relleno de queso crema:
* En un bol, mezclar el queso crema y el azúcar en polvo. Batir con una batidora hasta que quede suave y cremoso.
* En un bol aparte, montar la nata hasta que forme picos suaves.
* Incorporar suavemente la nata montada a la mezcla de queso crema hasta que esté suave y combinada.
4. 4. Montar la tarta:
* Una vez que las capas de merengue se hayan enfriado, colocar una capa en una fuente de servir.
* Extender una generosa cantidad de cuajada de mandarina por encima, seguida de una capa del relleno de queso crema.
* Añadir la segunda capa de merengue, y repetir con más cuajada de mandarina y relleno de crema de queso.
* Cubrir con la última capa de merengue y esparcir por encima el resto del relleno de crema de queso.
* Decorar con mandarinas frescas, arándanos, ramitas de romero y una ligera capa de azúcar en polvo.
Tiempo de preparación: 30 minutos
Tiempo de cocción: 1 hora 30 minutos
Tiempo total: 2 horas
Calorías por ración: 250 kcal (aproximadas, dependiendo del tamaño de la ración)
Raciones: 8-10 rebanadas
Por qué esta receta es atemporal:
La tarta de merengue de mandarina es una auténtica celebración de los ingredientes de temporada, que ofrece una versión fresca de los postres clásicos a base de merengue. El uso de mandarinas añade un toque cítrico que equilibra a la perfección el dulzor del merengue y la riqueza del relleno de crema de queso. Este postre es a la vez refrescante y goloso, ya que combina texturas como el merengue crujiente y aireado con la cuajada suave y la crema de queso aterciopelada. Es el postre perfecto para ocasiones especiales, fiestas o simplemente para alegrar cualquier velada. Lo que lo hace atemporal es la forma en que destaca la elegancia de los ingredientes sencillos y la alegría de crear algo hermoso y delicioso.
Información nutricional:
* Calorías: 250 kcal (por ración)
* Carbohidratos: 32 g
* Proteínas: 3 g
* Grasa: 13 g
* Azúcar: 23 g
* Fibra: 1 g
Preguntas frecuentes:
¿Puedo sustituir las mandarinas por otro cítrico?Sí, puede utilizar naranjas o tangelos si no dispone de mandarinas. Tenga en cuenta que el perfil de sabor cambiará ligeramente.
¿Puedo prepararlo con antelación?Sí. Las capas de merengue se pueden hornear y guardar en un recipiente hermético hasta 3 días. El requesón de mandarina y el relleno de crema de queso también pueden prepararse con antelación y refrigerarse hasta 2 días.
¿Cómo puedo evitar que el merengue se agriete?Asegúrese de que la temperatura del horno es baja y uniforme. No abra la puerta del horno durante la cocción, ya que esto puede hacer que el merengue se agriete debido a los cambios bruscos de temperatura.
¿Y si no tengo maicena?Puede utilizar fécula de patata como sustituto o, si no tiene ninguna de las dos, puede omitirla por completo. El merengue seguirá saliendo bien.
Consejos para que la tarta quede perfecta:
1. 1. Claras de huevo: Asegúrate de que las claras están a temperatura ambiente antes de montarlas. Esto ayuda a que alcancen el volumen y la textura adecuados.
2. Consistencia de merengue: Cuando añada azúcar a las claras, hágalo gradualmente y asegúrese de que el azúcar se disuelve por completo antes de dejar de batir. El merengue debe formar picos duros y brillantes.
3. Evitar que el merengue quede empapado: Deje que el merengue se enfríe completamente antes de montar la tarta, ya que un merengue caliente puede ablandarse y perder su estructura al montarlo en capas.
4. Consejos para la cuajada de mandarina: Remueve la cuajada constantemente para evitar que se queme. Si se espesa demasiado, puede añadir un poco de agua para aflojarla.
5. Consejos de conservación:
Guarda el pastel sobrante en un recipiente hermético en el frigorífico. El merengue se ablandará con el tiempo, por lo que es mejor disfrutarlo en los 2-3 días siguientes al montaje para obtener una textura óptima. Si desea mantener el merengue crujiente, guarde las capas y el relleno por separado y monte la tarta justo antes de servir.
Conclusión:
La tarta de merengue de mandarina con relleno de queso crema no es sólo un postre, sino una experiencia que evoca la alegría de las frutas de temporada y el arte de la repostería. Desde las ligeras y crujientes capas de merengue hasta el cremoso relleno y la ácida cuajada, cada bocado es una perfecta armonía de sabores. Es el postre definitivo para los que quieren impresionar con un plato que es a la vez visualmente impresionante y maravillosamente delicioso. Tanto si se trata de una ocasión festiva como de una simple reunión, esta tarta será siempre la estrella de la mesa, convirtiéndose en un eterno favorito durante años.