El hojaldre, con su textura ligera y capas crujientes, es un clásico de la repostería que puede parecer complicado, pero con esta receta descubrirás lo sencillo que puede ser prepararlo en casa.
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¡Lo mejor de todo es que no necesitas levadura! Esta receta es perfecta para quienes buscan un método fácil, rápido y con ingredientes comunes.
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Prepará tus manos y el rodillo, porque vas a sorprenderte con el resultado.
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Ingredientes
Para la masa:
250 g de harina común (aproximadamente 2 tazas).
1/4 cucharadita de sal.
30 g de manteca (2 cucharadas).
120 ml de agua bien fría (1/2 taza).
Para el laminado:
120 g de manteca (bien fría).
Preparación
En un bol grande, colocá la harina y la sal. Agregá la manteca en pequeños trozos y frotá con las manos hasta que obtengas una textura arenosa.
Incorporá el agua fría poco a poco y mezclá hasta formar una masa suave y homogénea. Evitá amasar demasiado para que no pierda ligereza. Envolvé en film y dejá reposar en la heladera por 30 minutos.
Mientras tanto, colocá la manteca para el laminado entre dos hojas de papel manteca. Extendela con un palo de amasar hasta formar un rectángulo delgado. Refrigera hasta que esté firme pero flexible.
Sacá la masa de la heladera y estirala en un rectángulo lo suficientemente grande como para envolver la manteca laminada. Colocá la manteca en el centro y doblá los extremos de la masa para cubrirla completamente.
Con cuidado, estirá la masa nuevamente en forma de rectángulo. Doblala en tercios, como si estuvieras plegando una carta. Girala 90 grados y repetí este proceso tres veces, refrigerando por 15 minutos entre cada pliegue para mantener la manteca fría.
Una vez lista, estirá la masa al grosor deseado. Usala para hacer tus preparaciones favoritas: empanadas, tartas o hasta croissants.
Precalentá el horno a 200°C. Colocá las piezas en una bandeja para horno y cociná por 20-25 minutos o hasta que estén doradas y crujientes.
Consejos adicionales:
Trabajá rápido para evitar que la manteca se derrita y las capas no se formen correctamente.
Si querés un acabado más brillante, pincelá las piezas con huevo batido antes de hornear.
Esta masa es súper versátil, podés usarla tanto para preparaciones saladas como dulces.
¡Ahora sí, disfrutá de un hojaldre casero fácil y delicioso, listo para impresionar a todos!